Wednesday, December 01, 2010

Una flor para la tumba de un vasquito

-"Excepto las de la imaginación, había perdido todas las batallas".

Fuiste vasco y ya estabas muerto cuando te conocí, pero parece que una sola no te bastaba porque hoy volviste a enterrarte entre mi gente. Y yo, que tengo tuberculosis con el tiempo y un hueso en la garganta desde el siglo tres, pasé horas revisándome los dedos, la piel, busqué entre las articulaciones, incluso por el pelo y nada, y no encuentro el nombre que puede tener la herida de la despedida lejana de un desconocido.

-"Dejó en herencia un verso de Neruda, un tazón con pestañas de papel flotando en el café y una guitarra tísica y viuda".

Te llamaste Mezo Bigarrena, amigo de Chico Buarque, Abonizio y Sabina, desertor de amistades a los tiros por algunos caprichos con corpiño. Y mirá vos, hoy descubro que las Flores en su Entierro de Joaquín y Fito eran para tu tumba. Compañero okupa de una casa abandonada y marino mercante crucificado en un resumidero. Y a mí qué me tiene que venir a morder tu muerte a tantos años de distancia, piedrita gris del ripio.

-"Era un tipo impresionante. Era jodido estar muchas horas con él porque siempre la veía sin anestesia".

¿Por qué en el manuscrito original de "En este barrio" escribiste "dicen que quieren rockanroll y algunos hasta se fuman un puerro", si después de todo ya no tengo a nadie en el mundo que pueda entender eso? Dejar la vida untada fuerte en cada canción, y encima asegurar que "con el que ha perdido siempre estaré, pero nunca nunca con todos los que no se la han jugao". Y qué fue eso de mirar a los ojos a la señora católica que te encontró tirado en la calle, que te puso unos roperos viejos y una cucha en un galpón del fondo, y decirle "Luisita, Dios ha muerto".

Antes de hoy sabía de tus viajes de ida y los adoquines coloridos que le pusiste al cielo azul de Rosario, y tu buscar y buscarás y rebuscarás como un mendigo de lata pateando plazas. ¿Pero a mí qué me tenía que importar, zapatito gastado sin ser viejo?

-"Veinte años atrás lo conocí en Londres, conspirando contra Franco. Era el rey del aceite de hashís y le excitaba más robar un banco que el mayo de París".

El gran golpe esperaba más allá de tu mano y año tras año se iban yendo así. "Nací el día del loco y moriré el día del loco" decías y dejame adivinar, no con la voz puesta en el orgullo postizo sino como una cicatriz, un susurro que pide una puerta o un sorbo de alivio, y un día y nada más, solamente un día despejado de nubes negras para poder creer la mentira de estar salvados.

-"Lo poco que tenía lo invirtió en un hueso de lujo para el perro, y en pagar al contado la mejor corona que encontró... para que hubiera flores en su entierro".

"Hoy voy a ver si mi cuerpo resiste los embates dementes de la soledad". Y nadie lo esperaba porque no hubo quién conozca las arrugas más profundas de tu sonrisa. "Y el amor es juego de plebeyos que buscamos ardientes cómo triunfar". Y yo lo sé, una camisa hecha viento puede empujar a todos los veleros, y nadie jamás sospecha qué tempestades hay dentro de la caverna que sopla. Si "a esta vida no hay quién la aguante", si los pies soñaban con un salto, "si me tiro de un balcón y caigo en tu cama", si viste en ese árbol de Palermo un puente que te iba a ayudar a escapar lejos de vos, de vos, fogonazo de un líquido helado, veleta loca, reino de ruidos y también un gato peleador con sed de dragón. Te he descubierto y ya te conocía tan pequeño, tan primo hermano y tan espejo, y nos he llorado a los dos como lloraría un trapo, cuando fue mi luto de arena corriendo por tu voz el que cantó "mañana por la noche el misterio me habrá abandonado al fin".



Y saber que alguna vez cantaste, como un himno a la vida

- Hoy no quiero -
Hoy no quiero ser otro llanto preso a un sueño de ayer
ni tampoco el lamento manto que me impide ver
Quiero ser sombra roja y una puerta abierta al amanecer,
un clarín anunciando el fin de tu atardecer

Hoy no quiero venganza mansa, quiero el fuego también
Ni tu amor enjaulado cansa a quien puedas mi bien
Asesino de nubes, voy queriendo saber quiénes están con quién
un perro rastreando tu piel y tu último amén

Hoy no quiero ser nada, quiero ser aquél que no fui
y en mi pecho ahorcando muero con quien me mata a mí

y en callado combate vamos viendo quién de los dos es el más fiero
si el que muere matando o el que llega primero

Hoy quiero ser futuro vivo, sano y no malherido
Quiero ser hombre alado, silbo que sea entendido,
cazador de sorpresas y una risa completa viviendo en su nido
una espada cantando y una rabia de niño

Hoy quiero irte queriendo donde nadie te quiso
para que el universo ande como sale un verso
desgarrarte el planeta para que seas libre y nadie te mande
respirando y viviendo, ni pequeño ni grande

quiere que me quiéreme
el dia que me quieras...
quiere que me quiéreme
el dia que me quieras...
quiere que me quiéreme
el dia que me quieras...


Mezo Bigarrena fue encontrado ahorcado en los bosques de Palermo el día del loco, un 22 de enero de 1993, día siguiente al que lo vieron loco de contento por haber terminado de grabar al fin su segundo disco.

Monday, November 22, 2010

107 (Cortázar)

Escrito por Morelli en el hospital:

La mejor cualidad de mis antepasados es la de estar muertos; espero modesta pero orgullosamente el momento de heredarla. Tengo amigos que no dejarán de hacerme una estatua en la que me representarán tirado boca abajo en el acto de asomarme a un charco con ranitas auténticas. Echando una moneda en una ranura se me verá escupir en el agua, y las ranitas se agitarán alborozadas y croarán durante un minuto y medio, tiempo suficiente para que la estatua pierda todo interés.

(-113)

Friday, October 01, 2010

LA POESÍA ES UN ARMA CARGADA DE FUTURO (versión de Serrat del poema de Gabriel Celaya)

Cuando ya nada se espera personalmente exaltante,
más se palpita y se sigue más acá de la consciencia,
fieramente existiendo, ciegamente afirmando,
como un pulso que golpea las tinieblas,
que golpea las tinieblas.

Cuando se miran de frente
los vertiginosos ojos claros de la muerte,
se dicen las verdades;
las bárbaras, terribles, amorosas crueldades,
amorosas crueldades.

Poesía para el pobre, poesía necesaria
como el pan de cada día,
como el aire que exigimos trece veces por minuto
para ser y tanto somos, dar un sí que glorifica.

Porque vivimos a golpes, porque apenas si nos dejan
decir que somos quien somos,
nuestros cantares no pueden ser sin pecado un adorno,
Estamos tocando el fondo,
estamos tocando el fondo.

Maldigo la poesía concebida como un lujo
cultural por los neutrales
que lavándose las manos, se desentienden y evaden.
Maldigo la poesía de quien no toma partido,
partido hasta mancharse.

Hago mías las faltas. Siento en mi a cuantos sufren
y canto respirando.
Canto y canto y cantando más allá de mis penas,
de mis penas personales,
me ensancho, me ensancho.

No es una poesía gota a gota pensada,
No es un bello producto. No es un fruto perfecto,
es lo más necesario: lo que no tiene nombre.
Son gritos en el cielo, y en la tierra son actos.

Porque vivimos a golpes, porque apenas si nos dejen
decir que somos quien somos,
nuestros cantares no pueden ser sin pecado un adorno.
Estamos tocando el fondo,
Estamos tocando el fondo.

Thursday, September 16, 2010

Cuarto día

Jueves: el departamento es chico y un remolino de gorriones se metió por la ventana. Ventarrones, papelitos y despeines, y mi corazón tiene una capital donde acaba de estallar la anarquía.

Wednesday, September 15, 2010

Del libro Plástico Cruel (de José Sbarra)

SEÑALES DE TRANSITO

Reuní un congreso de hormigas putas para que masticaran las hojas de tu recuerdo. Te borré de las paredes, del techo, del aire. Dediqué días y noches a borrarte. Lijé maderas, sombras y sábanas. Borré tu culo de las sillas. Hice un trabajo de borradería tan bueno que, si algún día volvés, cuando trates de hablar, verás que tenés borradas la lengua y las palabras.

Sunday, September 12, 2010

El Libro del Mal Amor (de José Sbarra)

¿Alguien habrá acercado su mejilla
a una almohada usada por mí para recordar
el roce de mi piel?

¿Alguien habrá permanecido despierto
... hasta la alta noche
para seguir amando con su mirada
mi egoísmo dormido?

¿Alguien habrá caminado por una calle desierta
de un país lejano murmurando mi nombre
llamándome?

¿Alguien habrá serenado su corazón
apretando contra su rostro
pequeñas ropas mías?

¿Alguien habrá preferido mi muerte
antes que verme
en brazos de otra persona?

¿Alguien habrá gozado
entrando al baño después de mí,
con el vapor,
la temperatura y los perfumes
de mi intimidad?

¿Alguien habrá deseado caer en el sueño
con mi sexo anclado en mi cuerpo?

¿O solamente yo
amé de esa manera?


Tuesday, September 07, 2010

Como tú, piedra (de León Felipe)

Así es mi vida,
piedra,
como tú. Como tú,
piedra pequeña;
como tú,
piedra ligera;como tú,
canto que ruedas
por las calzadas
y por las veredas;
como tú,
guijarro humilde de las carreteras;
como tú,

que en días de tormenta
te hundes
en el cieno de la tierra
y luego
centelleas
bajo los cascos
y bajo las ruedas;
como tú,
que no has servido

para ser ni piedra
de una lonja,
ni piedra de una audiencia,
ni piedra de un palacio,
ni piedra de una iglesia;
como tú,
piedra aventurera;
como tú,
que tal vez estás hecha
sólo para una honda,
piedra pequeña
y
ligera...

Sunday, September 05, 2010

El Tango de la Muerte (del Ale Dolina)

¡Qué se haga ya la oscuridad!
¡Deténgase la sucesión!
En una ausencia tan brutal
que es uno mismo el que no está.
Y no sentir ningún dolor
es lo que duele más.

Llegó el olvido, vencedor,
y ya el saqueo comenzó.
En la memoria sin guardián
libros de viento robará,
y de tu verso más cantor
nadie se acordará.

Yo juego con la carta más segura,
no importan los vaivenes de la suerte.
Aquí donde me ve, yo soy la Muerte,
el precio de la última aventura.

Yo soy mucho más fuerte que la vida,
yo soy la última rima del poema,
mi voz en todo acorde suena
y con cualquier camino yo hago esquina.

No hay que pensar ni preguntar:
yo soy mi propia explicación.
Soy el sentido y el motor
de la poesía y el amor.
La nada espera, vamos ya:
su tiempo terminó.



Thursday, August 26, 2010

Camarines (de Adrián Abonizio)

Cara de mujer enamorada
un vacio de rubor
no dice nada
Estás como un reflejo, un torbellino
con un lápiz de escribir
la dirección
para el angel que no encuentra la casita
la ciudad donde nunca más se sufre

Me serviste un tinto
y un jazmín del aire
me manché en el camarín
con rouge el traje
Estabas reflejada y enmarcada
en una luz de festival
que no culmina
y la luz voltaica te devora
y son horas de partir
lejos de este perro mundo

La luz se fue, y empecé a sonar
y yo canté hasta no dar más
una vez más, pedian más
y los odie, y odie el lugar
y cuando abri los ojos
ya no estabas
y cuando abri los ojos
ya no estabas más

Tuesday, August 17, 2010

Para ti, mi amor (de Jacques Prévert)

Fui al mercado de pájaros
y compré pájaros
Para ti
mi amor
Fui al mercado de flores
y compré flores
Para ti
mi amor
Fui al mercado de chatarra
y compré cadenas
Pesadas cadenas
Para ti
mi amor
Después fui al mercado de esclavos
Y te busqué
Pero no te encontré
mi amor.

Saturday, August 14, 2010

Pedacito de "Frente al Mar del Timor" (de Hugo Foguet)

...pero también quieren que el universo tenga un principio y que en el principio haya un tipo con una mente paranoica armando el mecano, dándole cuerda y poniéndolo a caminar en el día cero. ¿Y esto no es empezar también de la "nada"? Entonces cambiemos la mala palabra y digamos "siempre", desde siempre mon amour y el último día será el primero y los huesos se pondrán nuevamente de pie y la carne a pegarse a los huesos y la sonrisa a juntarse a los labios y tus ojos vendrán otra vez caminando desde la otra punta del universo.
El poeta tenía razón cuando decía que la realdad es como una cebolla. Cada capa que le quitás te llena de lágrimas los ojos pero si no lavás con lágrimas tus pobres y queridas esperanzas decime con qué carajo vas a lavarlas.
Estas filosofías o como quieras llamarlas, terminaron esa mañana en La Ballena Azul con café con leche y tortillas...

Friday, July 30, 2010

¿Te presento a mi familia? (de Nando Dip)

Desde atrás de un inmenso mediterráneo vinieron cantando tres gargantas eternamente jóvenes. Puesto que es mentira que la experiencia propia sólo a uno le vale, dejame que te presente a mis tres profes españoles, abanderados del famoso anónimo "la puta... ¡que lindo estar vivo!", quienes (con la mejor de las buenas voluntades, cabe destacar), se animan a encabezar el desfile de mi familia: Joan, Ismael y el tío Sabina.

Por detrás, o por el oeste, dependiendo de como agarrés el mapa, vienen voces y guitarras por igual... mi compadre Adrián se animó a dejar las partituras para poner un rato en ejercicio su bigote de cantante. Juan Carlos le sigue las notas con soltura, demostrando que para ponerle onda a la cuestión, la cabellera no hace falta (pero tampoco sobra). Marcos, Daniel, Jorge, Carlos y Carlos me enseñaron que no solo las guitarras son las necesarias... pero, ¿que es eso?!

Tantas son las voces, que no me gustaría olvidar ninguna... el tío Silvio, por ejemplo, hace unos días me comentó que estuvo haciendo un experimento de seguimiento colectivo, y llegó a una conclusión bastante interesante: "Los amores cobardes (me dijo) no llegan a amores o a historias. Se quedan allí."

No por mala intención, ni mucho menos por menospreciar a tantas gargantas cantantes tan geniales que tan seguramente estoy olvidando en este momento (lo cual suele suceder, puesto que somos familia muy numerosa), permitime que te presente (y que te muestre de paso que en mi familia no somos todos músicos) al tío J.R.R., a Gabriel, a Umberto, Julio, Howard, mi tía Alfonsina ... permiso! ¡permisoo! bueno, sabrás disculpar, pero es que la casa es chiquita, y se hace un poco incómodo que estén todos aquí. Sucede que cada vez que traigo a casa la noticia de que les voy a presentar a alguien, todos se amontonan para conocer de quien se trata... y justo hoy te traje a vos. ¿Ves? ¡Les encanta dar la bienvenida!

¡Vení! Están todos invitados... tal vez conozcas a algún que otro miembro de la familia... lo cual siempre te va a servir para entrar un poquito mas cómodo a las reuniones. Pero nada más que un poquito, eh? mirá que si te da vergüenza hablarles, se van a ofender.

Éste es el primo Quentin, que se dedicó a dirigir algo un poquito mas complicado que rol... o bueno, por lo menos mejor remunerado. Algo parecido hizo J. Michael, el del apellido raro. Salvo que el, en lugar de actores, últimamente está probando con las viñetas.

También vino el pato con apellido tano (protagonista del famoso dicho: "pato con guantes, ataja penales"), el primo Robin, el tío parche (médico de la familia), mi tío segundo Akira (que, aunque algunos lo pongan en duda, el "tío segundo" SI es parte de la familia) y Tino.

Como tutores a cargo de la pequeña casa, te presento a la tía Ceci (mas "mamá" que "tía" para mi gusto, pero ella insiste...), el viejo Raúl, José Luis, Maru, Jorge y el padrino Buho.

Todos astillas del mismo palo.

De mis hermanos... Otro día te los presento. Ellos son bastante mas escurridizos... Sobre todo mi hermano mayor.

¿Entonces? que decis... ¿vas a formar parte de mi familia? dejame que te de un par de advertencias, ya que si entrás, dificilmente puedas salir después. En esta familia te vamos a enseñar...

- A levantarte todos los días sin dejar que la rutina te aplaste... ¡hoy puede ser un gran día!
- A disfrutar de todo aquello que sea difícil...
- A abrazar con ganas

Y sobre todo, he de advertirte que en mi familia, los finales felices no existen. Aquí hace tiempo que aprendimos a disfrutar de el camino por andar, a proponernos lo imposible...
¿Que tiene de feliz un final?

Nando. Abrigo de invierno.

Wednesday, July 07, 2010

No me olvides

Sobre el manto de hierba fresca que cubre la sepultura del corsario Steam creció un No me olvides. A veces, desde las apacibles ramas de la arboleda, desciende una abeja para robar el polen, rascando los pistilos con sus patitas, saboreando el néctar. Cuando termina, después de frotarse las antenas se aleja en vuelo sinuoso, ebria hasta las rayas.

Thursday, July 01, 2010

He andado muchos caminos (de un Machado Serrat)

He andado muchos caminos,
he abierto muchas veredas;
he navegado en cien mares,
y atracado en cien riberas.

En todas partes he visto
caravanas de tristeza,
soberbios y melancólicos
borrachos de sombra negra,

y pedantones al paño
que miran, callan, y piensan
que saben, porque no beben
el vino de las tabernas.

Mala gente que camina
y va apestando la tierra...

Y en todas partes he visto
gentes que danzan o juegan,
cuando pueden, y laboran
sus cuatro palmos de tierra.

Nunca, si llegan a un sitio,
preguntan a dónde llegan.
Cuando caminan, cabalgan
a lomos de mula vieja,

y no conocen la prisa
ni aun en los días de fiesta.
Donde hay vino, beben vino;
donde no hay vino, agua fresca.

Son buenas gentes que viven,
laboran, pasan y sueñan,
y en un día como tantos,
descansan bajo la tierra.

Sunday, June 06, 2010

Pterodáctilos (de José Sbarra)

1
En la era más estrambótica de la Tierra, los pterodáctilos fueron los únicos seres capaces de construir parejas absolutamente fieles.
En el caso de que muriese uno de los integrantes, el otro no formaba una nueva unión.
Si el pterodáctilo sobrevivía, dedicaba el resto de su existencia a deambular por los sitios frecuentados con su pterodáctila. Y realizaba este peregrinaje sin comer ni beber. Sin ir en búsqueda de otra compañera.
Poco a poco iba debilitándose hasta que moría, preferiblemente en el exacto lugar en el que había caído su pterodáctila.

2
Ella lo amaba. Volar hambrientos, pero juntos, le parece una fascinante aventura. Ama su coraje. Ama la paciencia de su vuelo sobre los volcanes. Lo considera un valiente. Ella lo ama. Ama que se olvide de comer por atrapar una piedra azul. Hay otros pterodáctilos, pero ninguno tiene su estrafalaria manera de planear. Ella lo ama. Desde el día en que conoció a ese tonto pterodáctilo nunca se separó de su lado. Por eso él sabe que ella lo ama.

3
En la sinfónica turbulencia de la atmósfera, entre nubes doradas, un pterodáctilo vuela junto a su pterodáctila. Sus ojos antediluvianos son los espejos del fuego en el corazón de los volcanes. Vuelan juntos. Como viajeros elegantes.
¿De qué sirve un pterodáctilo sin su pterodáctila?
Toda la Tierra con sus ardientes temperaturas y con sus inesperados desplazamientos les ordena amarse.
Y sobre la catedral volcánica del planeta, y sin saberlo, los pterodáctilos están amándose.

4
De pronto su vuelo se interrumpió. La pterodáctila cayó por un túnel transparente en el aire. Cayó sobre la arena como una roca. Como un meteorito atraído terriblemente por la Tierra.
Estaba en vuelo y el vuelo se detuvo como un amor que dice que no. Un instante de desconcierto y luego la pterodáctila cayó.
El pterodáctilo volaba a su lado. Supo el momento preciso en que su pterodáctila cayó. Pero no miró hacia abajo. Negó el vacío. La implacable vertical de la caída.
Miró hacia un costado y hacia otro. No la vio. Se resistió a aceptar lo demasiado obvio. Y no se animó a mirar hacia abajo. Con espanto volvió la cabeza hacia un costado y hacia el otro.
La buscó en todas las posibilidades de vuelo. Nunca miró hacia abajo.
Aterrizó en la playa.
Caminó con la vista más allá del presente, buscándola lejos. Lejos. Se detuvo sin verla. Intuyó la presencia de una roca nueva sobre la arena. El pterodáctilo cubrió su cara con cuarenta millones de años.
Una tras otra resbalaron sus monumentales lágrimas.
En la boca ígnea de los volcanes resonaron sus alaridos. Pero nunca miró hacia el sitio del dolor.

5
Vuela. No lo distraen las piedras azules que saltan de los volcanes. Sigue su rumbo. Y su rumbo es buscarla.
Sus retinas sólo reflejan la imagen de ella. Cree verla en el movimiento de una rama o sobre la cresta salvaje de una ola.
No se pregunta por qué se fue. Se pregunta hacia dónde.
Su cabeza de cretáceo no puede concebir un abandono, sólo un extravío.
Es puro volar sin calma, un vivir buscándola para salvarla y salvarse al tiempo que la salva. Sin ella, volar es un acto inútil.
Se tropieza con las nubes y confunde el cielo con el mar. Va de un lado hacia otro, desorientado y torpe. Fatiga tanto el vuelo si se vuela solo. No quiere volar. Quiere querer.
No los unían los proyectos ni la costumbre. Los unía el volar sabiendo que el otro volaba al lado. Los unía ese voltear la cabeza en el mismo instante como para decirse:
¿Ves?, estamos volando.

6
Con larval inocencia un pterodáctilo busca a su pterodáctila. El no sabe nada de la muerte. Sólo sabe planear con ella como dos gigantes remeros del espacio. Sólo sabe que un pterodáctilo y una pterodáctila son un mismo cuerpo. Y ahora a él le falta una parte.
Ella murió una noche en que los cielos eran dorados. Aún está sobre la arena su cadáver fosilizándose, pero él insiste en la búsqueda porque eso no es ella, no es su pterodáctila: le falta el vuelo, la mirada y el olor del amor: Ignora las leyes de la naturaleza, cree en el reencuentro. Si necesita a su pterodáctila tiene que ser porque en algún sitio ella lo espera.
Vuela chocando contra todas las salientes de la noche. Va una y otra vez por los lugares que conocieron juntos. Desde la orilla de aquel lago vieron la primera lluvia de estrellas, en ese cráter la tuvo entre sus alas. Vuelve al cielo. Insiste en la búsqueda. Es una esperanza en vuelo y condenada.
Desde lo alto de la noche color magenta se lanza en picada. Solitario y en silencio se desploma en ese fragmento de playa que nunca quiso mirar.



Friday, May 14, 2010

Bienbenito (de Iván Noble)

Tu sonrisa se hizo el pan con dulce de mis mañanas. Todavía no sé nombrar este amor que me desarma. Cuando te veo así, panzón y filibustero lo único que me importa, ahora sí, es llegar a vieja. Te trajieron a un lugar absurdo, difícil y hermoso, lleno de gente que salta a cabecear con los codos. “Hay que andar con pie de plomo” dicen las bisabuelas; yo diría que vayas lento y parejo, pero que gastes tus suelas. Vas a ver qué rico el mar, los besos, los amigos. Van a dolerte a veces las muelas, mujeres y olvidos. Mirá bien a los dos lados antes de cruzar la vida y no te mastiques el viejo cuento de la otra mejilla. Yo que vos no me pierdo ni el fútbol, ni Beatles, ni el tango. De la gente con choferes, yo pasaría de largo. Si vas a decir mentiras no pierdas la elegancia. Sé compañero en el vino y siempre caballero en las resacas. Y nunca le pongas a nadie la rodilla en la nuca; no te tomés en broma jamás a los hijos de puta. Vas a tener que hacer mucho con lo que haremos de vos. Bienvenido a este lío, hermano de mi alma, enano de mi corazón.


Friday, April 23, 2010

Pedro Navaja (de Rubén Blades)

"Daría toda mi creación por haberla escrito yo"
-Gabriel García Márquez

Por la esquina del viejo barrio lo ví pasar,
con el tumba´o que tienen los guapos al caminar,
las manos siempre en los bolsillos de su gabán
pa´ que no sepan en cuál de ellas lleva el puñal.

Usa un sombrero de ala ancha de medio la´o
y zapatillas por si hay problema salir vola´o,
lentes oscuros pa´ que no sepan qué está mirando
y un diente de oro que cuando ríe se ve brillando.

Como a tres cuadras de aquella esquina una mujer
va recorriendo la acera entera por quinta vez
y en un zaguán entra y se da un trago para olvidar
que el día está flojo y no hay clientes pa´ trabajar.

Un carro pasa muy despacito por la avenida,
no tiene marcas, pero to´s saben que es policía.
Pedro Navaja, las manos siempre dentro el gabán,
mira y sonríe y el diente de oro vuelve a brillar.

Mientras camina pasa la vista de esquina a esquina,
no se ve un alma, está desierta to´ la avenida
Cuando de pronto esa mujer sale del zaguán
y Pedro Navaja aprieta un puño dentro el gabán.

Mira pa´ un la´o, mira pa' el otro y no ve a nadie,
y a la carrera, pero sin ruido, cruza la calle.
Y mientras tanto en la otra acera va esa mujer
refunfuñando pues no hizo pesos con qué comer.

Mientras camina del viejo abrigo saca un revólver, esa mujer,
y va a guardarlo en su cartera pa´ que no estorbe.
Un treinta y ocho "Smith & Wesson" del especial
que carga encima pa´ que la libre de todo mal.

Y Pedro Navaja, puñal en mano, le fué pa´ encima,
el diente de oro iba alumbrando to´a la avenida,
mientras reía el puñal le hundía sin compasión,
cuando de pronto sonó un disparo como un cañón.

Y Pedro Navaja cayó en la acera mientras veía a esa mujer
que, revólver en mano y de muerte herida, a él le decía:
"Yo que pensaba: hoy no es mi día, estoy sala´,
pero, Pedro Navaja, tú estás peor: no estás en na´".

Y créanme gente que aunque hubo ruido nadie salió.
No hubo curiosos, no hubo preguntas, nadie lloró.
Sólo un borracho con los dos cuerpos se tropezó,
cogió el revolver, el puñal, los pesos y se marchó.

Y tropezando se fue cantando desafina´o,
el coro que aquí les traje mira el mensaje de mi canción:

"La vida te da sorpresas, sorpresas te da la vida, ¡ay, Dios!"
La vida te da sorpresas, sorpresas te da la vida, ¡ay, Dios!
Pedro Navaja matón de esquina, quien a hierro mata a hierro termina

La vida te da sorpresas, sorpresas te da la vida ¡ay, Dios!
Pedro Navaja, maleante pescador, mal anzuelo que tiraste,
en vez de una sardina un tiburón enganchaste

I like to live in America

La vida te da sorpresas, sorpresas te da la vida, ¡ay, Dios!
Ocho millones de historias tiene la ciudad de Nueva York.

La vida te da sorpresas, sorpresas te da la vida, ¡ay, Dios!
Como decía mi abuelita: "El que último ríe , se ríe mejor"

I like to live in America

La vida te da sorpresas, sorpresas te da la vida
Cuando lo manda el destino, no lo cambia ni el más bravo,
si naciste pa´ martillo, del cielo te caen los clavos

La vida te da sorpresas, sorpresas te da la vida, ¡ay, Dios!
Barrio de guapos cuida´o en la acera,
cuida´o camara´ que el que no corre vuela

La vida te da sorpresas, sorpresas te da la vida, ¡ay, Dios!
Como en una novela de Kafka el borracho dobló por el callejón

La vida te da...

Saturday, April 03, 2010

BAUDELERIANA -poster- (de José Sbarra)

Suicídense
por favor suicídense
por asco por locura
por resentimiento por narcisismo
para no dejarse morir lentamente
por asombro ante la maldad
por asfixia por horror
por soledad
por amor
dentro de lo posible por amor
pero por favor
suicídense.

Y si alguien les pregunta
qué hora es
respondan sin dudarlo
es la hora de suicidarse.



Wednesday, March 03, 2010

Sailing to Byzantium (de William Butler Yeats)

THAT is no country for old men. The young
in one another's arms, birds in the trees
- those dying generations - at their song,
the salmon-falls, the mackerel-crowded seas,
fish, flesh, or fowl, commend all summer long
Whatever is begotten, born, and dies.
Caught in that sensual music all neglect
monuments of unageing intellect.

An aged man is but a paltry thing,
A tattered coat upon a stick, unless
soul clap its hands and sing, and louder sing
for every tatter in its mortal dress,
nor is there singing school but studying
monuments of its own magnificence;
And therefore I have sailed the seas and come
to the holy city of Byzantium.

O sages standing in God's holy fire
as in the gold mosaic of a wall,
come from the holy fire, perne in a gyre,
and be the singing-masters of my soul.
Consume my heart away; sick with desire
and fastened to a dying animal
it knows not what it is; and gather me
into the artifice of eternity.

Once out of nature I shall never take
my bodily form from any natural thing,
but such a form as Grecian goldsmiths make
of hammered gold and gold enamelling
to keep a drowsy Emperor awake;
Or set upon a golden bough to sing
to lords and ladies of Byzantium
of what is past, or passing, or to come.


Tuesday, March 02, 2010

Viaje

El mantel del horizonte, una canción al hombro, una hoguera de muñecas tras mi espalda, y cien años de soledad.

Sunday, February 21, 2010

Desvelo

Duermo todo el día.

De noche me despierto con la lengua con sabor a fuego y el centro de la galaxia latiéndome abajo del cuello. Inmediatamente me incorporo y me pongo a planear conspiraciones de piedras contra los vitrales más altos. Después cuelgo a la muerte en una percha y camino haciendo equilibrio por las líneas del asfalto de una carretera secreta. Si hay luz de luna y un viento oloroso a tierra, me uno a una cuadrilla de ideales pistoleros y andamos por ahí tirando la bronca hasta armar una guerra que libere pueblos de palabras esclavas.

Me la paso dibujando cosmogonías, estrella por estrella, y cuando se escapa un cometa me le subo al galope como a un caballo. Entonces saco el mapa del imperio de las catedrales y voy por su ruta soplando un cuerno para verlas desplomarse ante la voluntad de cada ladrillo.

Ahí es cuando decido echar barro sobre el cuero del olvido. Escribo cartas viajeras que dejan su nido en la adolescencia y se alejan en bandada hasta que las atrapan ciertas mujeres voladoras, y paso a pie descalzo por los tejados apuntando bien alto el mosquete.

De noche abarco y aprieto. De noche conquisto el firmamento esperando ansioso el contraataque del sol.

Pero cuando el día se levanta puntual me encuentra en alguna cama, blando como un queso. Me destapa, me cachetea, me ata las zapatillas y me lava los dientes para sacarme a la calle a empujones. Me carga por la vereda, sosteniéndome del mentón como a un muñeco educado, para eso de guardar las apariencias. Entonces me sacude de aquí para allá igual que a una pelota de pinball, mientras me despulga las ilusiones.

De repente llega el sol, y yo soy un rulemán obediente en los pistones de la ciudad. Donde sea que arrojen mi esqueleto, tengo que rodar unos metros más allá. El cuento siempre repite la primera página y yo, sonámbulo, corrijo expedientes, hago la fila, espero luz verde, cobro mi sueldo, doy las gracias y hasta luego.

Pero resulta que a veces, cuando llueve, me ven pateando charcos y pregonando libertinajes a diez voces, rebotando afuera de la ley en un cuerpo dormido, mientras sueño que escapo descalzo por las cornisas y los techos, bajo la luz de una luna blanca y despechada.


Wednesday, January 27, 2010

Corazón de Barco (de Adrián Abonizio)

Tengo el corazón en dos mitades
que apenas pueden sostenerse;
la derecha tira al viento
y la izquierda tira redes.

Y al abrir los ojos de mañana,
cuando comprendo donde estoy,
creo que el mundo cabe en mi cama
pero me creo lo que no soy.

Corazón de barco,
furia reprimida,
marea alta con las velas cortas,
si lo que importa no es esta vida.
Corazón de barco,
todo lo abandonas,
será tu origen de bosques lejanos
eso de andar buscando lo imposible.

La abulia de los domingos
clava su arenal en mí.
Estoy desnudo, sólo recuerdo
el astillero donde nací.
Y me hago daño creyendo
que alguien vendrá desde la orilla
me creo libre, pero dependo
que ella se suba a sus costillas.

Corazón de barco,
furia reprimida,
marea alta con las velas cortas,
si lo que importa no es esta vida.
Corazón de barco,
todo lo abandonas,
será tu origen de bosques lejanos

eso de andar buscando lo imposible...


Monday, January 11, 2010

Woodyallenmente

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